¡¡¡Hola fanáticos de la limpieza!!! en post anteriores os dimos trucos de limpieza y mantenimiento tanto para horno como para microondas, y hoy nos toca… ¡nuestra vitrocerámica! Sí habéis leído bien, hoy vamos a dedicar nuestro post de limpieza a nuestra vitrocerámica.
Cómo todos
sabemos la vitrocerámica es uno de los electrodomésticos que más
usamos, la que más descuidamos y al que menos tiempo le dedicamos a
la hora de limpiar, le pasamos una bayeta húmeda o con producto
específico y listo, quizás porque pensamos que el mantenimiento es
difícil y nos llevará mucho tiempo y ¡estamos completamente
equivocados!
Os vamos a dar unos trucos con los que vais a quedar con la ¡boca abierta! cuando veáis que esos pequeños rayazos que nosotros mismos provocamos al arrastrar nuestras sartenes, ollas, o simplemente apoyando cosas en la vitrocerámica se eliminan y el brillo que vuelve a coger es impresionante.
Os confesamos que nosotros quedamos realmente asombrados cuando lo hicimos por primera vez.
¿Lo mejor de todo?
Los ingredientes que vamos a utilizar, como bien sabéis en Limpiezas Adinual siempre intentamos buscar la mejor solución y la más accesible para todos.
¿Preparados para anotar los ingredientes?
Ingredientes:
-Opción 1:
*pasta de dientes blanca (si contiene bicarbonato para el blanqueamiento mejor).
*paño o una bayeta, si es micro-fibra ¡mucho mejor!
*agua.
-Opción 2:
*3 vasos de agua.
*15 ml de amoniaco.
* paño o una bayeta.
-Opción 3:
* paño o una bayeta.
*bicarbonato sódico.
*agua.
Todas las opciones que os damos son muy fáciles de hacer ¡empezamos!
Nuestra primera opción es la más sencilla, ya que todos tenemos pasta de dientes en nuestra casa. Es tan fácil como echar un poco de pasta de dientes en un trapo o bayeta y frotar sobre los rayazos en forma circular hasta que desaparezcan (si hiciera falta repetir la acción), una vez acabado pasamos una bayeta limpia para eliminar los restos de pasta de dientes y ¡listo!
Nuestra segunda opción también es muy fácil y a diferencia de la anterior es que, veréis como aparte de quitar los rayazos, nuestras vitrocerámica cogerá brillo ¡comenzamos!
Mezclamos tres vasos de agua con 15 ml de amoniaco, mojamos la bayeta y hacemos lo mismo que en la primera opción, frotamos sobre los rayazos en forma circular tantas veces como sean necesarias hasta que desaparezcan, notareis que nuestra vitrocerámica ¡cogerá brillo!
Y nuestra última opción es con bicarbonato sódico, que todos solemos tener en casa, es muy fácil ¡atentos! Hacemos una mezcla de bicarbonato y agua hasta conseguir una pasta, pero no te olvides de ir revolviendo para evitar que queden grumos, como si fuera la pasta de dientes, untamos la bayeta en la pasta que acabamos de hacer e igual que hicimos en las opciones anteriores… frotamos en forma de círculos hasta que desaparezcan, una vez acabada esta acción limpiamos con una bayeta limpia para quitar los excesos y ¡ya estaría!
¡No tenéis excusa para no mantener vuestra vitrocerámica limpia y brillante!
Cuéntanos, ¿conocías estos trucos? ¡Déjanos un comentario con tu experiencia! o escríbenos a limpiezasadinual@limpiezasadinual.com
*Limpiezas Adinual no se responsabiliza de los daños que puedan ocasionar estos trucos de limpieza.
¿Quieres recibir todos nuestros trucos de limpieza, novedades y curiosidades que publicamos en nuestro blog?
Suscríbete y lo recibirás cada mes en tu correo electrónico (sin publicidad ni spam).